IMO 2020, el impacto para las compañías navieras
Al acercarse el 1ro. de enero y la entrada en vigor de esta nueva norma IMO 2020, las compañías navieras deben imperativamente poner sus buques en conformidad limitando sus emisiones de óxidos de azufre en un 0,5% m/m, frente a un 3,5% en vigor hasta la fecha.
Cada compañía tiene la opción de instalar scrubbers, utilizar combustibles con bajo contenido en azufre o incluso explotar energías alternativas como el GNL, pero estas opciones suponen un coste colosal para los transportistas que esperan compensarlas aplicando recargos.
A tan solo algunos días de Año Nuevo, cuando algunos transportistas ya han empezado a aplicar su recargo, las cantidades anunciadas varían considerablemente de una compañía a la otra y resulta complicado comprender las razones. ECC, LSS20, FAF, EFF o incluso GFS, los términos son numerosos para definir una sola y misma cosa: el sobrecargo vinculado a la aplicación de la nueva norma de la IMO 2020.
Diferentes sobrecargos según cada transportador
Resulta complicado comprenderlo ante la falta de transparencia de las compañías con respecto a la fijación de los recargos e igualmente en los cálculos. ¿En última instancia el sobrecargo no será un medio para compensar la disminución de las tarifas del transporte de mercancías? Para ayudarte a ver más claramente, he aquí un cuadro de los sobrecargos anunciados por 10 de las principales compañías en el tráfico Asia-Europa del Norte:
Comprender las brechas entre los precios
Resulta interesante constatar que se encuentran brechas de importe en el mismo seno de las alianzas comerciales, por ejemplo, entre Maersk y MSC, de la alianza 2M, cuya diferencia de tarifa asciende a 45$/TEU, es decir, MSC anuncia un precio 63% más barato que su socio danés.
Estas diferencias pueden explicarse en las estrategias aplicadas por las compañías. Por ejemplo, MSC aplicó rápidamente una estrategia a favor de los scrubbers y muy pronto la mitad de su flota estará equipada con sistemas de reprocesamiento del humo, permitiendo así que sus buques sigan consumiendo combustible pesado más barato después de la aplicación de la norma el 1ro. de enero de 2020, mientras que Maersk introdujo los scrubbers demasiado tarde; en consecuencia, tan solo de un 10% al 15% de su flota estará equipada con este sistema.
Consecuencias para los expedidores
Para los expedidores tiene muy poca importancia que una compañía utilice combustibles con bajo contenido en azufre como Maersk o bien los scrubbers como MSC. En cambio, para ellos será determinante el importe de los recargos a la hora de elegir el transportista.
Por consiguiente, el acceso a una información completa y fiable es esencial para que este período de transición transcurra sin tropiezos. Un agente de transporte digital bien establecido podrá orientarte hacia los mejores itinerarios, los modos alternativos de transporte de carga y los precios más bajos del mercado. Cuando son identificados todos los costes, siempre es más fácil tomar las decisiones correctas.
